Ayuso asegura que el Gobierno sabe por qué sucedió el apagón pero "no lo quiere contar"

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado este lunes que el Gobierno conoce los motivos del apagón eléctrico que sufrió España el pasado 28 de abril, pero "no lo quiere contar" porque "se nos funden los plomos como país".

En un desayuno informativo, Díaz Ayuso ha cargado contra el Gobierno, que "siempre busca culpables" en lugar de soluciones, y ahora ha tocado enfrentar a las nucleares contra las eléctricas cuando son sectores "complementarios".

"Bajo esa pretendida lucha de clases, de rico, pobre, bueno o malo, y que vivamos agraviados en un país que nunca fue así y que nunca tuvo tantas chapuzas juntas, chinches en la T4, cuatro trenes tirados en los andenes... Nunca habíamos vivido una imagen tan lamentable de las infraestructuras españolas", ha censurado.

La dirigente madrileña del PP ha advertido del "daño" que ha provocado a la reputación de España que "se nos fundan los plomos como país", cuyos motivos, ha apuntado, el Gobierno conoce.

"Lo saben y no lo quieren contar porque están en su relato", ha afirmado, sobre las críticas del presidente del Gobierno a las centrales nucleares tras el apagón.

"En lugar de poner a los mejores profesionales, ponen activistas de carné con un sueldazo cada uno de ellos porque le deben favores al presidente", ha afirmado Díaz Ayuso, en alusión a la presidenta de Red Eléctrica, Beatriz Corredor.

"España no se puede permitir un país que se ha levantado con tanto trabajo y tanto esfuerzo desde la Transición, tener a los más inútiles por ser los que tienen lealtad perruna al presidente del Gobierno, al frente de infraestructuras o al frente de instituciones o de empresas clave", ha incidido.

Y ha mencionado que en su reciente viaje a Francia le trasladaron que el cierre de la central de Alsacia ha provocado más emisiones y más encarecimiento de la factura eléctrica, y que ministros socialistas "se arrepienten de haber tomado una decisión tan sectaria como ésta".

En esta línea, ha dicho que la propia vicepresidenta de la Comisión Europea, Teresa Ribera, ahora "dice sí a las nucleares de otros", lo que supone una "incoherencia", solo por "enfrentar" y "dividir socialmente".